Los sindicatos están preocupados por la independencia del servicio público: todos temen que los propietarios de las cadenas se vean obligados a mendigar regularmente a las autoridades de control para poder llegar a fin de mes.

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28 de junio de 2022, 7:34 AM
28 de junio de 2022, 7:34 AM

En Francia, probablemente habrá mucha música en la radio y reposiciones en la televisión el martes 28 de junio. Todos los sindicatos de la radiotelevisión pública convocan una huelga. En RFI, pero también en France 24 y MCD, en France Télévisions (canales de televisión) y en Radio France (frecuencias de radio), aumenta la preocupación por el anuncio de la supresión del canon que financia los medios de comunicación públicos.

Por Sébastien Jédor

La contribución a la radiodifusión pública, el otro nombre del canon, desaparecerá. Esta fue la promesa de Emmanuel Macron de devolver a los franceses su poder adquisitivo. Asciende a 138 euros al año y lo pagan, con algunas excepciones, todos los contribuyentes franceses que tengan un televisor.

Los sindicatos de periodistas han calculado que el canon cuesta a los franceses sólo 38 céntimos de euro al día, y que suprimirlo supondría encontrar más de 3.000 millones de euros al año para financiar RFI, France 24, MCD, Radio France y France Télévisions.

Los sindicatos están preocupados por la independencia del servicio público: todos temen que los propietarios de las cadenas se vean obligados a mendigar regularmente a las autoridades de control para poder llegar a fin de mes. No es el caso de un recurso como el canon, que se asigna directamente a los medios de comunicación.

Las alternativas posibles

En un informe publicado el lunes, la Fundación Jean-Jaurès, a través de la investigadora Julia Cagé, propone una alternativa: mantener el canon, pero en forma de impuesto progresivo, para que pese menos sobre el presupuesto de los hogares más modestos. En un momento en el que aumentan las noticias falsas y las guerras de propaganda, el servicio público de radiodifusión francés debe tener "garantizados unos recursos permanentes e independientes de los ciclos políticos", afirma.

La otra preocupación es el plan de fusión de todo el sector de la radiodifusión pública, un proyecto reactivado por el Senado. Esta fusión fortalecería al sector público frente a los gigantes del sector privado: Bolloré y TF1-M6, por ejemplo. Pero, siempre según los sindicatos, sería un proyecto sinónimo de ruptura social y empobrecimiento de contenidos. Para los sindicatos, la radiotelevisión pública ya no podría cumplir sus misiones principales: informar, educar y entretener a todos los ciudadanos, sin la presión de hacer rating.

 ¿Cuál es el coste del canon?

El canon es un impuesto de 138 euros en la Francia peninsular y de 88 euros en los territorios franceses de ultramar. Solo afecta a los hogares que poseen un televisor: los demás no lo pagan, aunque vean los programas en un ordenador, una tableta o un smartphone. Se utiliza para financiar los medios de comunicación públicos franceses (France Médias Monde, France Télévisions, Radio France, etc.). Este recurso se ha vuelto más estratégico desde la supresión de la publicidad en las tardes y en los programas infantiles de los canales de servicio público. Su supresión supondrá una pérdida de ingresos de más de 3.000 millones de euros, que el Estado se ha comprometido a compensar a las cadenas públicas.