La osteoporosis se desarrolla cuando el cuerpo pierde demasiado hueso, no produce suficiente hueso nuevo o ambos

29 de abril de 2024, 9:00 AM
29 de abril de 2024, 9:00 AM

La osteoporosis es una enfermedad ósea común que afecta a millones de personas en el mundo, aunque a menudo es subestimada.

Caracterizada por la pérdida de densidad ósea y la fragilidad resultante de los huesos debido a un deterioro estructural del tejido óseo, esta condición puede pasar desapercibida durante años hasta que una fractura revela su presencia. La buena noticia, sin embargo, es que la osteoporosis puede prevenirse y tratarse eficazmente con medidas simples y un enfoque proactivo en la salud ósea.

La osteoporosis se desarrolla cuando el cuerpo pierde demasiado hueso, no produce suficiente hueso nuevo o ambos. Este desequilibrio conduce a huesos más débiles y propensos a fracturas con el tiempo. Las fracturas resultantes, especialmente en la columna vertebral, las caderas y las muñecas, pueden causar dolor crónico, discapacidad e, incluso, complicaciones potencialmente mortales en los casos más graves.

Carlos Espinoza Aguilar, director de la carrera de Medicina de la Universidad Franz Tamayo, Unifranz, aclara que la osteopenia es un preaviso y alerta temprana de la enfermedad.

“En medicina se utiliza el término de osteopenia para referirse a una disminución moderada de la mineralización de los huesos y osteoporosis es un caso más severo, es decir una disminución importante de esa mineralización”, explica el académico.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la prevalencia de esta enfermedad se estima en un 30% de las mujeres caucásicas y en un 8% de los varones caucásicos mayores de 50 años, y asciende hasta un 50% en mujeres de más de 70 años.

Factores de riesgo y prevención

Múltiples factores, que van desde la genética, la edad, el género o el estilo de vida, contribuyen al desarrollo de este trastorno.

Las mujeres, en particular después de la menopausia, tienen un mayor riesgo debido a la disminución de los niveles de estrógeno, una hormona que ayuda a mantener la densidad ósea. Sin embargo, los hombres también pueden verse afectados, especialmente a medida que envejecen.

Espinoza puntualiza que estos trastornos tienen como antecedente una gran variedad de patologías o enfermedades. Por ejemplo, para la osteopenia influyen enfermedades como el hipertiroidismo, hiperparatiroidismo, la anorexia nerviosa, problemas del metabolismo que no permiten la absorción de vitaminas y minerales, artritis reumatoide o sedentarismo.

En tanto, la osteoporosis se profundiza durante el climaterio en el caso de las mujeres (ante la ausencia de estrógeno, que es la que favorece la absorción del calcio), la edad de los adultos a medida que se envejece, los cambios hormonales o la alimentación deficiente, entre otros.

La prevención juega un papel crucial en la lucha contra la osteoporosis. Adoptar un estilo de vida saludable que incluya una dieta rica en calcio y vitamina D, la práctica regular de ejercicios de fuerza y ​​resistencia, evitar el tabaquismo y moderar el consumo de alcohol son pasos clave para mantener la salud ósea.

Unifranz
La prevención juega un papel crucial en la lucha contra la osteoporosis


Diagnóstico y tratamiento

La detección temprana es fundamental para prevenir complicaciones graves. Los médicos pueden evaluar el riesgo de osteoporosis mediante pruebas de densidad ósea y evaluación de factores de riesgo. Si se detecta la enfermedad, existen varios enfoques de tratamiento disponibles, que incluyen medicamentos para fortalecer los huesos, suplementos de calcio y vitamina D, y cambios en el estilo de vida.

Las alteraciones en los huesos pueden tratarse con una adecuada actividad física (caminatas) y alimentación: la leche y los productos lácteos, la soya, los pescados, los frutos secos y las frutas frondosas.

El tratamiento más aconsejable cuando existe una patología subyacente, es la participación de un médico especialista, que pueda dosificar el calcio o la ingesta de otros alimentos de acuerdo a la enfermedad.

“No podemos decir que se trata de un problema irreversible, pero consideramos que la recuperación es dificultosa incluso con tratamiento médico”, dice Espinoza.

El diagnóstico de alteraciones puede detectarse por laboratorio; los valores de calcemia (calcio en la sangre) de 8.5 a 10.2 mg/Dl. son valores normales.; cuando desciende hasta 2.5 se considera osteopenia y por debajo osteoporosis, agrega el médico radiólogo.

En la actualidad, el mejor método para medir el estado o gravedad es la densitometría ósea (DMO), que es un diagnóstico realizado por un médico radiólogo.

Marianela Siñani Cárdenas, médico internista, señala que la osteoporosis es un proceso que puede contenerse en el tiempo y que, en algunos casos, puede ser reversible con un tratamiento adecuado.

“De no ser tratada oportunamente, las consecuencias son, principalmente, las fracturas sobre todo a nivel de columna y cadera que pueden condicionar discapacidad, postración y franco deterioro de la calidad de vida”, señala.

La osteoporosis no es una parte inevitable del envejecimiento, sino más bien una condición prevenible y tratable. Con conciencia, educación y medidas proactivas, podemos reducir significativamente el impacto de esta enfermedad en la salud y la calidad de vida de millones de personas en todo el mundo.

Es fundamental promover la importancia de la salud ósea y fomentar la adopción de hábitos saludables desde una edad temprana para prevenir la osteoporosis y sus complicaciones asociadas.