Seis de ocho jugadores recibieron el pago correspondiente al mes de febrero, pero debido a esos dos restantes el plantel decidió no entrenar. El paro se mantiene por "decisión del grupo", le dijo uno de los jugadores de Blooming a EL DEBER Sport.

16 de abril de 2024, 20:31 PM
16 de abril de 2024, 20:31 PM

Blooming sigue en paro. La dirigencia celeste solamente pudo cancelar a seis jugadores el salario correspondiente al mes de febrero. Aún le debe pagar a dos jugadores más, y por esos restantes el plantel decidió mantener el paro.

Según fuentes internas del equipo, la dirigencia del club había incumplido con los salarios de al menos ocho jugadores, lo que ha generado un malestar palpable entre los integrantes del equipo.

Si bien se pagó a la mayoría de los afectados, un jugador celeste, que prefirió mantenerse en el anonimato, expresó a EL DEBER Sport que la decisión de no entrenar es "una decisión del grupo" en respuesta a la falta de respuestas por parte de la dirigencia. O pagan a todos, o no se entrena.

La deuda afecta principalmente a los sueldos del mes de febrero, con algunos jugadores sin recibir ni siquiera el 50% de lo debido, mientras que otros estaban a la espera del pago completo. Esta situación no solo refleja las dificultades financieras del club, sino que también pone en peligro la continuidad de las actividades deportivas del equipo.

Pedro Vaca, vicepresidente de Blooming, intentó desmentir el paro en el programa Solo Fútbol Radio: "La noticia de que Blooming está en paro es totalmente falsa. Hoy (martes) no entrenó con normalidad por cuestiones del clima".

Precisamente, luego de esa declaración, desde el plantel celeste volvieron a confirmar que el paro es real. Hasta que la dirigencia no solvente las deudas pendientes, el paro se mantendrá en vigor.

Los problemas financieros de Blooming se agravan teniendo en cuenta su reciente eliminación prematura del Torneo Apertura; y en cuanto a lo deportivo aún tienen la imposibilidad de reforzar su plantel hasta julio, cuando se abre el libro de pases. Esta situación pone en riesgo no solo el desempeño deportivo del equipo, sino también su estabilidad financiera a largo plazo.